La transformación de la lealtad en el ámbito laboral
La lealtad; según, el diccionario de la Real Academia Española (RAE), significa: “cumplimiento de lo que exigen las leyes de la fidelidad y las del honor y hombría de bien”. Es decir, la construcción de las relaciones basadas en la palabra que daba un sujeto a otro, un grupo, familia, organización o empresa y se mantenía a través del tiempo. La palabra era la ley y su característica principal era su perdurabilidad y confianza, que eran incuestionables.
En épocas pasadas, la lealtad era el fundamento de cualquier relación o contrato, sostenidas entre dos personas. Pero, el sistema laboral que sustentaba esta relación de lealtad, estaba sujeto a la perdurabilidad del empleo; es decir, se sostenía hasta que el trabajador o profesional se jubilaba y, algunas veces, pasaba de generación en generación.
Hoy, el concepto de lealtad está en retirada y lo sustituye, un contrato legal, fundada por normas y reglas que regulan, las acciones laborales. La lealtad, se ha transformado en compromiso y responsabilidades que terminan cuando, el tiempo de contrato finaliza. Quizás se podría entender y comprender que, la transformación de la lealtad se liga irremediablemente a un espacio efímero de sucesos y relaciones contractuales, determinados por un tiempo restringido y regulado por un inicio y un fin.
Las empresas son dinámicas y las relaciones laborales temporales. La lealtad, se ha ido adecuando hacia esta misma lógica. En este sentido, podemos señalar que, la lealtad está determinada por la oferta y la demanda del tiempo de duración del trabajo.
Creo que todavía hay gente con la responsabilidad suficiente para ejercer su profesión, manteniendo un compromiso con su empresa; y ejerciendo esa lealtad a la que hace referencia este artículo.
Si bien es cierto, para poder ejercer y prestar ese compromiso con tu trabajo, la otra parte de corresponder.
Es una cosa de dos.
Yo opino que la relación laboral parte de la implicación de dos personas que se comprometen a tener una relación de negocios sana y de respeto independientemente de sus partes o de si el contrato es temporal, parcial, etc. Yo coincído con algunos autores en que se puede creer que la lealtad ha desaparecido en este escenario socio-económico actual, pero más bien ha evolucionado. Tenemos que dirigirnos hacia un trabajo más independiente en el tiempo, pero siempre comprometido con él y leal, todo ello nos servirá en nuestro futuro profesional.
Brian 🙂
La lealtad, que puede ser considerada un componente del compromiso del trabajador, se basa en diversos factores. Por ejemplo, si el gerente «se preocupa en atender a los principales intereses del trabajador, se le da la oportunidad de mejorar su condición de bienestar etc.». en ese caso, los gerentes desempeñan un papel crucial, es decir, la calidad de la relación que tenga entre el empleado y su gerente. Eso es lo que va a determinar el nivel general de compromiso del trabajador. Buenas empresas van haciendo, a lo largo del tiempo, una lista de buenos gerentes y de buenos equipos locales y la manera en que conectan gracias al trabajo de trabajadores y gerentes»